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PRECIPITACIÓN ACUMULADA DESDE EL 14 AL 20 DE NOVIEMBRE DEL 2018
Luego de las grandes lluvias del comienzo de la segunda década de noviembre, las condiciones meteorológicas se estabilizaron dando chance para que los suelos puedan escurrir excesos y en general para que los lotes vuelvan a quedar accesibles. Dentro de este contexto, el último sábado presentó el paso de una perturbación que no modificó sustancialmente la masa de aire pero que dejó precipitaciones que cubrieron todo el territorio entrerriano.
Como puede verse en el mapa las tormentas más consistentes en su distribución pluvial tendieron a ubicarse sobre el norte y este de la provincia. Sobre el resto de la provincia predominaron precipitaciones inferiores a los diez milímetros, con áreas reducidas donde se concretaron algunos chaparrones más generosos y de rápida dinámica.
Como decíamos, luego del paso de esta perturbación, el tiempo mejoró rápidamente dando paso a jornadas que fueron ganando temperatura de la mano de altos niveles de insolación y de la recomposición de la circulación del norte. Los últimos días han tenido una fuerte impronta veraniega, primero con el crecimiento de la temperatura y recientemente con el arribo de aire con mayor contenido de humedad.
Durante el resto del día de hoy, nuevamente se concretarán precipitaciones. Se está observando el paso muy rábido de un sistema frontal que avanza desde el sudoeste. Si bien se ven coberturas nubosas se buen desarrollo, las tormentas estarán transitando la provincia a una velocidad que no permitirá que se observen acumulados pluviales destacados. Este evento a su vez, puede tener gran dispersión dado que los chaparrones más intensos quedarán asociados a nubes de gran desarrollo que no tendrán oportunidad de reorganizarse en una determinada zona debido a la velocidad de avance. Hacia adelante se ven jornadas estables, posiblemente hasta el miércoles próximo.
ESTADO DE LAS RESERVAS AL 21 DE NOVIEMBRE DE 2018
Como hemos mencionado, la semana ha transcurrido con un importante despliegue de condiciones veraniegas sobre gran parte de las provincias del centro. La importante tasa de insolación las elevadas temperaturas, resumieron a paso acelerado los excesos hídricos. El escenario remanente es bueno, con reservas adecuadas en gran parte de la provincia y posiblemente en muchos sectores con una disponibilidad de agua mayor. El departamento Federal se perfila como el más ajustado.
Las lluvias previstas para el frente que está recorriendo la provincia no son de un nivel significativo, pero pueden ser un aporte que mantenga las reservas en un nivel satisfactorio.
Más allá de los problemas que pudieran haber causado las excesivas lluvias de la semana pasada, las mismas fueron muy oportunas para el maíz, quizá complicaron el avance de la cosecha de trigo pero que en general han resultado vitales para encaminar el paso de la gruesa.
El panorama de mediano plazo, no presenta el retorno de precipitaciones excesivas. Esta segunda quincena de noviembre tendería a mostrar acumulados más cercanos a los normales.
En términos de estadísticas meteorológicas, las lluvias ya han encontrado piso en los valores normales para el mes de noviembre, a gran escala. Es posible que haya zonas donde la situación pluvial sea más ajustada como por ejemplo el departamento Federal.
Para mantener las reservas en niveles favorables, posiblemente gran parte del territorio se arregle con eventos de 25 o 30 milímetros semanales, esto combinado con una disponibilidad de humedad adecuada, no en zonas deficitarias. Esto no parece una gran pretensión en volumen, aunque la distribución temporal está dejando mucho que desear.
CONDICIÓN DE MAÍZ DE PRIMERA
El maíz implantado en la provincia posee estados fenológicos que varían desde los vegetativos V8 (ocho hojas expandidas) a reproductivos Vt (panojamiento).
El cultivo a nivel provincial presenta una condición muy buena en el 83 % del área, 14 % buena y 3 % regular.
El porcentaje evaluado como regular es consecuencia de las heladas que afectaron plantas o sectores del cultivo que no lograron recuperarse a pesar de que las lluvias han acompañado oportunamente el desarrollo del mismo. El resto del área presenta buen estado sanitario, óptima densidad de plantas y muy buena respuesta a la fertilización.
CONDICIÓN DE GIRASOL
El girasol sembrado en la provincia continúa con una condición muy buena cuyo valor es del 90 % y buena en el 10% restante de la superficie.
El área evaluada presenta muy buen desarrollo, sin detectarse problemas sanitarios o con referencia a insectos.
La fenología del cultivo va desde R1 (botón floral) a R4 (comienzan a abrirse la inflorescencia y se ven las flores liguladas) Figura 1.
SIEMBRA DE ARROZ
La siembra de arroz en Entre Ríos se ubica en su tramo final.
La zona de represas ha finalizado las labores de siembra, en cambio en las zonas de pozos y río/arroyos (que abarcan el mayor porcentaje del área arrocera) aún resta implantar un 5% del total de la superficie intencionada.
La condición general del cultivo es muy buena y se encuentra desde dos hojas a pleno macollaje, Figura 2.
Las represas cuentan con un óptimo nivel de agua que permitiría cubrir las necesidades del arroz.
Los colaboradores mencionaron que la sanidad del cultivo es buena, no se observaron ataques de insectos y se logró un buen control de malezas mediante el uso de distintos principios activos que elevaron el costo de las labores.
SIEMBRA DE SOJA DE PRIMERA
La siembra de soja de primera en Entre Ríos ha ganado hetáreas desde la última evaluación realizada hace quince días. A nivel provincial se posiciona en un 53 % de avance en las labores, pero con gran disparidad de acuerdo a la zona, Figura 3.
Por un lado la zona oeste lleva un mayor avance direccionado por el nivel de reservas óptimos al momento de la siembra y en contraste la zona este, donde la siembra se inició luego de las lluvias ocurridas la semana pasada, ya que en estos departamentos practicamente las reservas eran escasas.
Es importante destacar que en algunos lotes de la zona sur y oeste se debe proceder a la resiembra parcial, a causa de las fuertes precipitaciones que ocasionaron el planchado del suelo.
