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PRECIPITACIÓN ACUMULADA DESDE EL 13 AL 19 DE JULIO DEL 2016
Algunas lloviznas modestas que persistieron en forma dispersa durante las jornadas del miércoles y el jueves pasado, fue lo último en cuanto a lluvias que por ahora viene dejando el mes de julio. El avance de aire frío y seco que se potenció desde el viernes de la semana pasada, favoreció un marcado cambio ambiental y en consecuencia la vuelta a las condiciones esperadas para la época, donde las bajas temperaturas deben ganar el protagonismo.
Desde el domingo en las heladas, sin ser demasiado intensas comenzaron a desplegarse en gran parte del territorio entrerriano. En general han prevalecido registros térmicos entre 0ºC y 3ºC, los cuales seguramente fueron moderados por el vasto predominio de suelos húmedos. De esta manera el aire cercano a la superficie no logró ser eficiente a la hora de producir heladas rigurosas. Independientemente de esta consideración, el invierno se recompuso con una presencia que no solo cubrió la provincia de ER, sino que se manifestó con intensidad hasta el sur de Paraguay y las vecindades de los estados brasileños.
El aire frío ingresado durante el fin de semana se ha venido reciclando incluso con la progresiva rotación de los vientos al sector norte, esto evidencia cuán al norte llegó el avance del aire de origen polar. La situación se ha mantenido estable a pesar de que se han dado jornadas con tránsito de nubosidad. Si bien se han observado periodos de buena insolación, la misma no ha sido constante.
Se espera que durante los próximos días el viento del noreste comience a incorporar aire más húmedo desde zonas tropicales, ya no hay aire frío para recircular y las temperaturas comenzarán a ascender. Cerrando el domingo y durante el lunes el escenario se perfila con mayor nivel de inestabilidad. No se descarta entonces el regreso de las lluvias.
ESTADO DE LAS RESERVAS AL 20 DE JULIO DEL 2016
Ingresamos al último tercio de julio con una disponibilidad de agua sobrada para el desarrollo de los cultivos de invierno que lograron implantarse. Lamentablemente no pudo aprovecharse el envión anímico que traían los productores para lograr aumentar en forma sustancial el área triguera. Las lluvias de finales de junio ya habían perfilado una situación de cierre para esta actividad, en tanto se mostraban persistentes los problemas de piso para el laboreo de las siembras.
Considerando este mapa como condición de partida para lo que resta del invierno, realmente el sólo se deja entrever alguna dificultad menor en el departamento La Paz. Esta zona es más vasta y se proyecta al centro de noroeste de SF, no con demandas mayores, pero si con un distinción deficitaria respecto de las reservas que disponen el reto de los departamentos de ER y por cierto, gran parte de la región pampeana.
El invierno está resultando atípico ya que en tardíamente las precipitaciones comenzaron a volcarse sobre el este. Sin ir más lejos, el final de junio fue muy húmedo para gran parte del este de CB y el norte de BA. Es decir la zona núcleo triguera tributaria de Rosario presenta una condición de humedad óptima, similar a la que predomina en ER.
Considerando la época y teniendo en cuenta que es muy posible que durante el comienzo de la semana próxima reaparezcan las lluvias, podemos decir que el camino para el resto del invierno esta trazado. Incluso con un mes de agosto seco, la disponibilidad de agua para el desarrollo de los cultivos de invierno se mantendría en buena forma, en retroceso, pero sin estrecheces. Por lo que se ve, este escenario no es el más probable. Entendemos que las lluvias aún sin alcanzar valores normales, pueden mantener el patrón hídrico en buena forma, con oscilaciones, pero con piso en reservas adecuadas.
TRIGO
La elevada humedad del suelo genera serios retrasos en la implantación de trigo en Entre Ríos, y se estima que se ha concretado alrededor del 73% (un progreso de tan solo 6 puntos porcentuales con respecto al anterior reporte). La intención original de siembra del cereal se situó entre 270.000 a 300.000 hectáreas.
En base a datos estadísticos históricos del SIBER, se observa que a esta altura del año calendario el progreso promedio en las labores de implantación se debería posicionar en el orden del 95% (ver Gráfico Nº 1).
A partir de dicho escenario, la proyección inicial no llegaría a concretarse, ya que a medida que transcurren los días se cierra la ventana óptima de siembra para el cultivo.
El estado fenológico se ubica desde emergencia a macollaje en lotes sembrados en fechas tempranas. Los colaboradores indican que el estado general de los cultivares de ciclo largo es bueno, aunque en algunos sectores se ha detectado la falta de plantas a causa del exceso hídrico en el suelo (que afectó la emergencia de la semilla), por lo cual están evaluando la resiembra de los mismos (Foto N° 1).
