Clima: Fuerte retroceso intermensual

La Consultora de Climatología Aplicada (CCA) informó que en la mayor parte de la región pampeana, aunque con variada demanda, hacen falta
las lluvias. Los productores comienzan a inquietarse.

Los primeros días de septiembre están fortaleciendo las incertezas climáticas. Esto posiciona un ambiente de nerviosismo de cara al inicio de las siembras y a la floración del maíz. Puede tomarse como referencia de lo que viene sucediendo, el retroceso que ha experimentado la clasificación de humedad en el último mes. Este resultado se vincula a una cobertura de pradera, lo cual es igualmente válido puesto lo que se pretende mostrar es la variación entre dos posiciones mensuales consecutivas. A la izquierda la situación para principios de agosto y a la derecha par principios de septiembre.
 

La comparación intermensual arroja un retroceso generalizado. Si bien hay zonas que se mantienen en valores de reserva que pueden considerarse normales, es claro que
la falta de precipitaciones del mes de agosto ha producido un impacto en la disponibilidad de humedad. Las zona principales de trigo, fundamentalmente las del
este se mantienen con buen potencial, pero deben recibir agua en la segunda quincena del mes. De otro modo la entrada a la floración será muy ajustada. Nótese
que se ha afianzado la difícil situación del sur de CB, avanzando sobre el noroeste de BA y el sudoeste de SF.

LA COMPARACIÓN INTERANUAL
Si la clasificación de principios de septiembre establece un retroceso respecto de principios de agosto, es aún más notable la diferencia con el comienzo de septiembre
de 2010.

En una rápida inspección de las dos imágenes, la provincia de BA sale claramente desfavorecida, habiendo algunos sectores del centro de SF mejor posicionados en
esta temporada. Nótese que si bien para esta época del año pasado no era tan mala la clasificación para la zona más seca en la actualidad, igualmente faltaba agua.

CONCLUSION
El ajuste en la clasificación de humedad que se ha dado en esta última etapa, no debe atribuirse al incipiente fenómeno de La Niña. Las fuertes irrupciones de aire polar de agosto han instalado masas de aire muy secas. Las mismas recién comienzan a modificarse, aunque es lenta la incorporación de humedad, notablemente distinta a la situación que se observó a comienzos de 2010.
Si bien durante los próximos meses, de fondo siempre se estará hablando del fenómeno La Niña, somos optimistas de cara a la segunda quincena de septiembre y
al mes de octubre. Con el agua que se obtenga, las siembras podrán avanzar y el contexto para el trigo puede ser adecuado. Obviamente si La Niña se intensifica el
bimestre noviembre-diciembre será de cuidado. Por el momento la situación es de advertencia y el primer paso es recuperar las precipitaciones de la transición
estacional.

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