Hace escasas semanas, el elevado precio de los fertilizantes nitrogenados, le restó competitividad al trigo debido a que para recuperar la inversión se necesitaba un rendimiento de indiferencia alto.
Según el Sistema de Información de Bolsa de Cereales de Entre Ríos, este hecho generó la demanda por cultivos alternativos como colza, carinta o lino.
La siembra de colza en Entre Ríos se encuentra cercana a su finalización, mientras que la de carinata el avance es inferior al 50 %.
“En el trascurso de los últimos días, se ha dado inicio a una nueva campaña de trigo, cuya ventana de siembra se ubica desde mediados de mayo a mediados de julio. Al respecto, hay que destacar que el avance en las labores estuvo en cierta manera limitada por la falta de humedad en la cama de siembra”, destaca el reporte semanal.
A su vez, destaca que, en los últimos días hubo una disminución del precio de la urea y un incremento en el valor del trigo, lo cual lo posiciona con mayor competitividad al reducir el rendimiento de indiferencia.
La intención del área triguera para la campaña 2022/23 aún presenta incertidumbres, en el ciclo 2021/22 la superficie abarcó 518.000 ha y posiblemente, para el actual ciclo se ubique en un valor similar.
La superficie sembrada de colza y carinata en la campaña 2021/22 fue de 9.550 ha y 2.000 ha respectivamente, y de acuerdo al relevamiento realizado dichos valores serían superados en la actual campaña 2022/23.