Carta al Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación
04/01/2010
D. JULIAN A. DOMINGUEZ
Buenos Aires, 30 de diciembre de 2009 Señor Ministro de Agricultura, Ganadería y Pesca de la Nación D. JULIAN A. DOMINGUEZ Av. Paseo Colón 982 S/D
De nuestra mayor consideración: Nos dirigimos a Usted a fin de llevar a su conocimiento los puntos de vista de las Bolsas de Cereales respecto de la grave situación que enfrenta el mercado de trigo. A pesar de la magra cosecha de trigo 2009/10, en plena etapa de recolección el mercado no ofrece a los productores la posibilidad de comercializar su producción por un desbalance entre la oferta y la demanda. La escasez de compradores obedece a que el sector exportador habría cubierto casi la totalidad de las ventas al exterior autorizadas (ROEs), y que la molinería enfrenta restricciones financieras y adecua sus compras al ritmo de sus requerimientos de industrialización. Esta situación genera evidentes perjuicios económicos y financieros a los productores, que arrastran pasivos contraídos a lo largo del año, como también a los restantes sectores de la cadena comercial (acopiadores, cooperativas, corredores, proveedores de insumos, etc.). Sin perjuicio de insistir en que la normalización sólo se lograría con la eliminación de restricciones cuantitativas a la exportación, haciendo posible que la demanda compita por la oferta disponible y los precios reflejen esa realidad, se propone la adopción de medidas coyunturales que atenúen el actual desbalance del mercado. A saber: - Implementar planes de financiamiento oficiales destinados a productores, a baja tasa de interés y por plazos no menores a 180 días, bonificada para aquellos productores que comercialicen su trigo a través del mercado de futuro con la garantía del trigo en depósito (certificado 1116A o warrants). Cuando el productor no sea sujeto de crédito, la asistencia financiera debería ser canalizada a través de acopios y cooperativas. - Actualizar el pago de las compensaciones adeudadas a los molinos harineros por la ONCCA, con el compromiso de aplicar esos recursos a la compra de trigo. - Instrumentar un plan de financiamiento a los molinos harineros para la adquisición adelantada de trigo. - Inducir a los molinos harineros a efectivizar sus compras, tanto en los mercados a términos institucionalizados como el mercado abierto, en un plazo preestablecido durante los primeros meses del 2010, a un ritmo que exceda sus necesidades mensuales de industrialización. Si las empresas molineras no acreditaran el cumplimiento, mediante la presentación de los respectivos contratos a precio hecho, perderían la garantía de trigo asegurado para consumo interno, liberando esa diferencia a la competencia en el mercado. - Reducir en, por lo menos, 1,5 millones de toneladas el trigo destinado a consumo interno partiendo de la certeza de que las 6,5 millones de toneladas retenidas a tal efecto exceden largamente las necesidades reales para la elaboración de los productos farináceos requeridos para abastecer la canasta familiar. La implementación conjunta de estas medidas evitará la sobreoferta de trigo en los primeros meses del año, dotará de liquidez a la industria molinera para su abastecimiento, posibilitará que la exportación continúe actuando en el mercado y favorecerá la formación de una estructura temporal de precios. Finalmente, la grave situación descripta impone propiciar la inmediata búsqueda de consensos entre las autoridades y todos los actores de la cadena comercial para que la campaña comercial 2010/11 se desarrolle en un marco que favorezca la siembra y comercialización del trigo. Sin otro particular y a la espera de una resolución favorable, quedamos a su entera disposición para ampliar las consideraciones que considere de interés, lo saludamos con nuestra mayor consideración.
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